ALGUNAS POESÍAS SOBRE LA NAVIDAD.......
LOS REYES MAGOS
Melchor, Gaspar y el negro Baltasar
por el desierto en camello van.
Melchor, Gaspar y el negro Baltasar
ante el niño Jesús se postrarán.
Melchor, Gaspar y el negro Baltasar
oro, incienso y mirra le llevarán.
Melchor, Gaspar y el negro Baltasar
en nuestro corazón siempre estarán.
por el desierto en camello van.
Melchor, Gaspar y el negro Baltasar
ante el niño Jesús se postrarán.
Melchor, Gaspar y el negro Baltasar
oro, incienso y mirra le llevarán.
Melchor, Gaspar y el negro Baltasar
en nuestro corazón siempre estarán.
Autor: María Victoria de Rosa
NOCHE BUENA DE ESPERANZA
Nochebuena de esperanza:
salta el alma de alegría,
porque llega sin tardanza
Jesús, hijo de María.
Es interior este gozo,
y, de forma natural,
va creciendo el alborozo
porque Jesús va a llegar.
José, lleno de cariño,
atento está con su esposa,
por si la Madre y el Niño
necesitan cualquier cosa.
Los dos esperan serenos,
felices en este trance,
la vista puesta en el cielo,
esperando el desenlace.
¡Cuánto amor cabe en el alma
cuando se sabe querer!:
dos personas entregadas
al Niño que va a nacer.
En la noche un llanto suena
y la llena de alegría:
con el Niño-Dios nos llega
la Eternidad a esta vida.
salta el alma de alegría,
porque llega sin tardanza
Jesús, hijo de María.
Es interior este gozo,
y, de forma natural,
va creciendo el alborozo
porque Jesús va a llegar.
José, lleno de cariño,
atento está con su esposa,
por si la Madre y el Niño
necesitan cualquier cosa.
Los dos esperan serenos,
felices en este trance,
la vista puesta en el cielo,
esperando el desenlace.
¡Cuánto amor cabe en el alma
cuando se sabe querer!:
dos personas entregadas
al Niño que va a nacer.
En la noche un llanto suena
y la llena de alegría:
con el Niño-Dios nos llega
la Eternidad a esta vida.
EL ÁNGEL Y LOS PASTORES
“Un niño envuelto en pañales,
reclinado en un pesebre”:
esas eran las señales
que a los pastores advierte
una Ángel que los visita
en inhóspitos lugares,
para darles la misiva
en medio de sus afanes.
Llenos de gran alegría,
van corriendo hasta Belén,
donde encuentran a María
y al que acaba de nacer;
aquellas sencillas almas
son elegidas testigos,
que luego al mundo proclaman
el nacimiento del Niño.
¡Benditas almas confiadas
y bendita sencillez,
reclinado en un pesebre”:
esas eran las señales
que a los pastores advierte
una Ángel que los visita
en inhóspitos lugares,
para darles la misiva
en medio de sus afanes.
Llenos de gran alegría,
van corriendo hasta Belén,
donde encuentran a María
y al que acaba de nacer;
son elegidas testigos,
que luego al mundo proclaman
el nacimiento del Niño.
¡Benditas almas confiadas
que fueron las señaladas
para darle a conocer!
para darle a conocer!