"Nunca le perdoné a mi hermano gemelo que me abandonara durante siete minutos en la barriga de mamá, y me dejara allí, solo, aterrorizado en la oscuridad, flotando como un astronauta en aquel líquido viscoso, y oyendo al otro lado cómo a él se lo comían a besos.
Fueron los siete minutos más largos de mi vida, y lo que a la postre determinarían que mi hermano fuera el primogénito y el favorito de mamá.
Desde entonces salía antes que Pablo de todos los sitios: de la habitación, de casa, del colegio, de misa, del cine... aunque ello me costara el final de la película..."
Fueron los siete minutos más largos de mi vida, y lo que a la postre determinarían que mi hermano fuera el primogénito y el favorito de mamá.
Desde entonces salía antes que Pablo de todos los sitios: de la habitación, de casa, del colegio, de misa, del cine... aunque ello me costara el final de la película..."
Poco a poco me fui obsesionando con ser el primero en todo, hasta que conseguí ser más rápido que mi hermano en todas las cosas y en todas partes, incluso mejor que él en el colegio.
Para ello, empecé a hacer cosas como estropearle sus trabajos, molestarle para que no pudiera estudiar o cogerle sus cosas.
Pronto mi hermano dejó de hablarme, pues yo me había convertido en un enemigo para él. Ya no quería jugar conmigo, ni me prestaba nada suyo. No quería hacer nada conmigo.
Empecpapá.é a preocuparme porque yo le quería muchísimo a pesar de la competencia que tenía con él. Así que decidí contarle todo lo que me pasaba a mamá y hecho un mar de lágrimas le dije que Pablo ya no me quería. Ella pronto me nego lo que yo había afirmado, me explicó que las cosas no eran así, que mi hermano gemelo me quería mucho y que nosotros éramos exactamente iguales para ella y para papá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario